cesar.rengifo
Gurú Olympista
Tonet
A veces parece que uno venga al mundo predestinado a tener una afición, en mi caso la fotografía. Y lo digo porque es muy raro que hace más de 60 años y en una comarca remota, alejada de las grandes ciudades y mísera en lo económico hubiera un fotógrafo que captara a mi madre embarazadísima de mí en una excursión que habían hecho un grupo de matrimonios amigos en carro tirado por mulos con una “carretera” infame y por supuesto sin asfaltar para ver la recién terminada presa del embalse de Benagéber, conocido entonces como Pantano del Generalísimo.
A lo largo de los años me he preocupado de buscar toda la documentación gráfica que he podido sobre tiempos pasados referida a mi familia y lugares en los que he ido creciendo, y para mi sorpresa he conseguido una colección de fotos relativamente importante, sobre todo, insisto, por tratarse de unos tiempos difíciles y de una comarca, La Serranía valenciana, muy mal comunicada por entonces y deprimida económicamente, donde lo que menos espera encontrarse uno son fotógrafos.
Con estos antecedentes, podríamos pensar que siempre he estado metido en esta afición, pero no es así, la economía familiar no me permitía comprarme una cámara, y casi menos todavía el hacer fotos, porque para quien no lo recuerde, hasta hace no muchos años cada vez que presionábamos el disparador sonaba el “clin-clin” de la caja registradora, así que teníamos que pensar muy mucho lo que íbamos a hacer y no ser precisamente los más rápidos con el dedito …
Mi primera cámara fue una Brownie Fiesta de Kodak de mi novia, con carrete de 60x60 mm que había que pasar a mano girando una ruedecita y el flash era con lámparas de magnesio de un solo uso y que fallaban a menudo, eso cuando no se disparaban tarde, pero con este cachivache de objetivo de plástico y por supuesto focal fija, la única opción era elegir sol o sombra, estuve haciendo fotos bastantes años, hasta que después de casados mi suegro me prestó una suya, la Werlisa Color, y de ahí salté cuando nació mi hija a mi primera Olympus, la OM-10 con focal fija de 50 y que me dio grandes satisfacciones y estuve usando hasta el año 2007.
Muy interesado por la informática, desde los años ‘80 he estado con los ordenadores entre manos, así que estaba cantado el salto a la fotografía digital, pero como siempre la economía familiar me frenaba hasta que un día mi mujer, que con preguntas indirectas y aparentemente inocentes se había enterado de la cámara que me gustaba, apareció en casa con la E-510 y los objetivos que venían en la oferta …
A partir de ahí he empezado a profundizar en esta afición, me he visto enormes cantidades de tutoriales en internet y de ese modo y fijándome mucho en lo que hacen los grandes pintores y fotógrafos intento mejorar dentro de mis posibilidades.
Aparte de la fotografía, me gusta mucho la lectura, sobre todo de los clásicos del Siglo de Oro español, en general me gusta toda la cultura clásica y los pintores de la Escuela Flamenca me sirven de inspiración a la hora de preparar mis fotos.
Y es que me considero mejor procesador que fotógrafo, de hecho mi equipo informático es bastante mejor que el fotográfico porque hace poco “reventó” el ordenador antiguo y ya que lo he tenido que renovar, me lo he puesto lo mejor que he podido, mientras que la cámara todavía respira, a pesar de que últimamente me ha parecido notarle problemas de enfoque. Por cierto, mientras proceso suelo escuchar música, unas veces J.S.Bach, otras Metallica, otras Santana … muy ecléctico.
Aunque mi formación estaba enfocada a otra cosa (soy licenciado en Económicas), toda mi vida he trabajado alrededor de la carretera, primero como comercial y tras unos años como administrativo cuando nació mi hija, para poder estar más tiempo en casa, volví a la carretera, esta vez conduciendo un gran camión con remolque con el que repartía muebles especialmente por los comercios de Almería y Granada, ya que ganaba mucho más de camionero que de oficinista, y ahí he estado los últimos 22 años hasta que una dolencia cardíaca me dejó fuera de combate, así que ahora ya no puedo trabajar básicamente porque debido a la medicación no me renuevan los permisos de conducir vehículos industriales, aunque si he de ser sincero, tenía pensado prejubilarme para el año que viene, pero las cosas se han precipitado.
A veces salgo del mundo de la fotografía, como ahora por mi enfermedad que me dejó mucho tiempo averiado, y otras por falta de inspiración. Me bajo del tren por un tiempo para retomarlo luego y ver si se me han renovado las ideas.
Tengo la suerte de disfrutar de algún compañero de afición que me propone salidas a fotografiar, unas veces ruinas, otras visitar algún lugar, un paisaje … y de esta manera vamos pasando el tiempo.
Hasta aquí un poco de mi vida para que me conozcáis al menos superficialmente.
Muchas gracias a todos por los ánimos recibidos.
BODEGONES
Este es el tema que probablemente me ha dado mayores satisfacciones en la fotografía.
Debido a mi trabajo disponía de muy poco tiempo para hacer fotos si tenía que desplazarme, así que se me ocurrió empezar a hacer fotos en casa de cosas habituales.
Los primeros intentos fueron muy desalentadores, pero puse mucho empeño en corregir mis fallos, busqué inspiración en los grandes pintores, especialmente en la Escuela Flamenca, y poco a poco empezaron a salirme cosas de las que no avergonzarme.
Bodegón 1
Bodegón 2
Bodegón 3
Bodegón 4
Bodegón 5
Bodegón 6
Bodegón 7
Bodegón 8
Bodegón 9